La noche del miércoles 11 de julio, Franco decidió ir a probar suerte (como casi todas las semanas), al casino flotante de Puerto Madero. La probada le salió para el carajo, ya que en 10 minutos el Black Jack le peló 100 mangos y tuvo que recurrir a un empréstito de 55 pesos. En un momento pareció que el azar le dedicaba un sonrisa, cuando pasó de la mierda a devolver el préstamo, recuperar los 100 y tener alrededor de 60 pesos de ganancia, pero como el juego es puto y traicionero y todo lo que sube tiene que bajar, en 2 o 3 giros de ruleta volvió a la decadencia. Conclusión: mas de gamba y media abajo. No es una fortuna... pero jode. La imágen tomada habla por sí sola. Se puede apreciar a un Franco despechado, mostrando su dolor en las mismísimas puertas del casino buscando entender porque no salió el rojo. Tranquilo jefe, para los timberos de ley, el juego siempre da revancha. Hay una moneda ahiiii...Foto: Luciano Aylagas
1 comentario:
jajajajajaja una postal clasica del casino
falta que el loco ponga la mano y pida para el bondi
grosa la foto
saludos para bulon
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